Por Javier Jaramillo Frikas
Un vil y mendigo atraco oficial
Carlos Knight Crespo, Carlos Knight Crespo, Carlos Knight Crespo, nunca olvidemos este nombre. Tampoco el de la empresa NL Technologies S.A de C.V. NL Technologies S.A de C.V. Sí, NL Tecnologies S.A de C.V. Es y son quienes están a punto de consumar uno de los atracos con soporte legal pero inmoral de Cabildos Municipales y los 30 integrantes del Congreso del Estado. Obviamente, los representantes populares coludidos (quizá no todos, pero sí muchos) están a punto o han recibido ya su comisión en este asalto millonario con el manto protector de la presunta legalidad en este asalto millonario con el manto protector de la presunta legalidad.
La luz que cae y caerá es relacionada a la energía eléctrica que es sinónimo. Carlos Knight Crespo y su negocio, suponemos casi tirando a un hecho, de luminarias en malas condiciones, la instalación de nuevas y, ni se imaginan estimados lectores: ¡Habrá internet gratuito en algunos lugares! Reecontraguauuuuu! Eso es pilón del generoso empresario asentado en Nuevo León, para chicos y grandes.
Son entre 15 y 20 años de concesión, Nada más. Hay que leer el Punto y Aparte de Guillermo Cinta Flores de este día 2 de julio del 2015. Es obligado. Es obligado.
Si sobre la superficie que escribe Guillermo se impregna de hedor el ambiente, qué no será si se llega al fondo del asunto de la concesión del servicio del alumbrado público en casi la totalidad de los 33 municipios de Morelos. En la edición de hoy jueves en La Unión de Morelos, Cinta –uno de los periodistas veteranos con mayor capacidad de análisis— no deja entrever, prácticamente obliga a los morelenses a exigir explicaciones a cabildos, pero sobre todo donde parece iniciar, gestar y concluir el criminal negocio: al Congreso del Estado.
Es un méndigo robo, quizá la acción de corrupción más vil de los últimos años. Y está a punto de consumarse. Obligado que corre dinero, en sumas que irán del tamaño de municipio y ambición de sus representantes populares. Leemos en Jojutla, se desgarran espectacular y artísticamente las vestiduras regidores y regidoras y multiplican los beneficios a esperar. ¿Qué bien puede recibir una ciudad como Cuernavaca, por ejemplo, si percibe más de siete millones de pesos mensuales por pago del Alumbrado Público? No olvidemos que en la administración de Manuel Martínez Garrigós se contrató a la empresa Mifel alrededor de 18 mil luminarias y se debe ese dinero en una gran parte. Un punto a pedir explicaciones es que fuentes que conocen del asunto, aseguran que se auditó y solo han encontrado 10 mil. Faltan, entonces, ocho mil. ¿Dónde están? ¿Llegaron o no? Es ese otro tema, pero en el Congreso saben de ello y hay que preguntarles. Una deuda de casi 180 millones de pesos que a Mifel se le reconoció en un juicio y está pagando el municipio 132 millones de pesos. Igual, que nos diga qué opina de la concesión que de origen aprobó el cabildo y que ya enviada al Congreso, se están arrepintiendo.
Sobran razones.
Y lo mismo que en otros municipios, casi en pleno, los cabildos van a salir porque así se los orienta su presidente. O desde el Congreso los diputados. Y aquí es donde la burra torció el rabo. Con todo el derecho a que nos replique, desmienta u lo que considere, enviamos estas líneas, directas, a Javier Bolaños Aguilar, el más hábil solicitante y negociador de los 30 diputados de este momento y los 30 de hace seis meses y de hace dos años. No olvidemos que con sagacidad y tirándose a matar se ganó el liderazgo de aquel Cártel del Agua que todavía existe, tanto, que es diputado local en funciones y diputado federal electo. Y ya fue legislador federal. Sabe usar el dinero apilado desde los cargos públicos. Muy capaz el hombre. Garantizamos que con este asunto no solo liquida cualquier adeudo de su última campaña, sino queda remanente para dos o tres más. Así de eficaz es Javier con el dinero público.
A él, dicen en el Congreso algunos de sus colegas, le toca operar el tema de las concesiones con los ayuntamientos. Es Todopoderoso. Y de unte en unte, casi lo ha logrado. Son detalles los que faltan. Y días los que habrá que recopilar mayor información que evite se consume uno de los robos más atroces de la vida pública en Morelos. Justo ahora que el horno no está para bollos. Si el Tocayo Bolaños nada tiene que ver, este espacio es suyo por completo, todo suyo. Que lo use. Y los 29 diputados restantes, una sola cosa: mamen, pero al burro lo dejan ahí. No se lo lleven…