Ojos Ciudadanos Por Martín Pérez ojosciudadanosmorelos@gmail.com
Se judicializa el proceso electoral
Son innumerables las quejas de candidatos de todos los colores en contra de presidentes de Comités Municipales y Distritales del Instituto Morelense de Procesos Electorales y Participación Ciudadana (Impepac) por el extravío de paquetes electorales, por la negativa a abrir paquetes electorales y recontar los votos de manera sistemática y por el manejo a favor de los candidatos del partido en el poder.
Los representantes de los partidos políticos en las casillas se durmieron en sus laures y en lugar de acompañar a los presidentes de casilla a llevar el paquete electoral con el acta de escrutinio hasta la sede del Comité Municipal o Distrital del Impepac, prefirieron irse a su casa y ahora los candidatos pagan las consecuencias.
La mayoría de las irregularidades se llevaron a cabo precisamente en el traslado de los paquetes electorales al término del conteo hasta el seno de los Consejos Municipales y Distritales del Impepac.
Como bien me dijo un candidato, que perdió por cierto, pues “no era obligación de los representantes de partido acompañar a los funcionarios de casilla a entregar el paquete electoral”, ahí está la principal razón de que perdieran el control de los paquetes.
Los dirigentes de los partidos políticos y la mayoría de los candidatos de la Zona Metropolitana de Cuernavaca había alertado sobre que se vivía una elección de estado, entonces por qué razón no cuidaron los votos como las niñas de sus ojos.
En el caso de Cuernavaca, se llevan computadas 160 casillas y se enviaron a reserva 301 para que se realice el conteo de voto por voto por irregularidades e inconsistencias como son: Paquetes abiertos, sellos violados, boletas de más o de menos y errores en las actas.
En total son 461 casillas y el reporte oficial da por computadas 510 casillas, entonces ¿en dónde se encuentran los otros 49 paquetes electorales?
Ante la falta de paquetes electorales, entonces se toma en cuenta el resultado de las actas, dado que hay que recordar que cada voto se contó ante la presencia de los funcionarios de casilla y los representantes de los partidos políticos, bueno eso se encuentra establecido en la legislación, pero en la práctica tal vez no fue así y de esto se aprovecha el partido en el poder, o sea cual debe de ser.
En el ajedrez, gana la persona que comete los menores errores; unos errores son forzados por el contrincante esto a consecuencia de jugadas brillantes, y otros son por falta de concentración o el no haber hecho un buen cálculo de la jugada.
El conteo en la capital del estado va para largo.
El presidente del Consejo Municipal o Distrital tenía la obligación de entregar cada paquete a los funcionarios de casilla y estos firmar de recibo, para posteriormente los funcionarios de casilla al término del conteo tenían la obligación de entregar los paquetes y que el presidente del Consejo Municipal o Distrital del Impepac les firmaran de recibido.
Si cada paquete electoral constaba de 750 boletas, de inmediato los integrantes del Consejo Municipal o Distrital tenían la obligación de checar el acta de escrutinio y detectar cualquier anomalía, si venían boletas de más o de menos, si las actas contaban con la firma de los funcionarios de casilla y representantes de los partidos políticos y ver las observaciones.
Por esta razón, uno no se explica la razón por la cual en el Consejo Municipal de Jiutepec del Impepac se les “extraviaran” ocho paquetes electorales y que se dieran cuenta de ello hasta el pasado jueves y que después aparecieran cuatro paquetes, uno de ellos con boletas electorales de las elecciones para diputado federal por el segundo distrito y para la diputación local por el sexto distrito.
Uno de los paquetes corresponde a la casilla de la colonia Los Pinos, del poblado de Tejalpa, en donde por cierto se quemaron solamente boletas, no se incendiaron las urnas, así es que los votos de esa casilla debieron ser tomados en cuenta para el conteo final a pesar de que se haya suspendido la votación por este acto terrorista.
En fin, en Cuernavaca todavía no acaba el proceso del conteo y ya pasaron los límites legales para declarar a un presidente municipal electo, tal vez esta sea una causal para pedir que la elección sea invalidada. El partido tricolor luchará hasta el último aliento, pese a la diferencia de unos cuatro mil votos entre el primero y el segundo lugar.
El PRI pidió de manera formal que la elección fuera atraída por el Instituto Nacional Electoral.
Dos funcionarias del Consejo Municipal del Impepac en Cuernavaca renunciaron por las presiones, pero seguramente no se salvarán de ser denunciadas ante la FEPADE por la omisión de no haber reportado la falta de 49 paquetes electorales. Ellas deberán decir ante el agente del ministerio público federal sí recibieron esos paquetes o no, si los pusieron a resguardo o no y si van más hondo, pues deberán señalar a quien les dio la instrucción de proceder de esa manera, a sabiendas que favorecen a alguno de los candidatos con estas acciones.
También, en el caso del Consejo Municipal del Impepac de Jiutepec, su presidenta será denunciada ante la FEPADE por haber extraviado tres paquetes electorales.
El proceso electoral se judicializará, por el momento el dirigente estatal del partido tricolor, Rodolfo Becerril Straffon, anuncia que impugnarán las elecciones en los municipios de Cuernavaca, Cuautla, Jiutepec y Tetecala, así como en los distritos IX y XV.
Por cierto, fuertes críticas ha recibido el titular del Poder Ejecutivo estatal, Graco Ramírez Garrido Abreu, por haber recibido a Cuauhtémoc Blanco Bravo, sin que este haya recibido la constancia que lo acredita como presidente municipal electo de Cuernavaca. Dicen que en política la forma es el fondo y el fondo es la forma. Al publicarse la fotografía del encuentro en redes sociales, se soltaron los demonios y creció el rumor de que Graco la dio una ayudadita a Cuauhtémoc por la tarde (dado que su gallo ya había perdido toda posibilidad), pues las encuestas de salida daban una gran ventaja a Maricela Velázquez Sánchez, que parecía inalcanzable.
Los dirigentes de los partidos políticos y los candidatos perdedores deberán aprender la lección de que no hay que descuidar los votos en ningún momento, no se pueden confiar en el momento clave de la elección.
Se revertirá el resultado en el segundo distrito federal
Arnulfo Montes Cuen se encuentra en el proceso de demostrar legalmente que le robaron la elección.
Su estrategia legal contempla la denuncia ante la FEPADE en contra de 300 presidentes de casilla del segundo distrito electoral federal, quienes tendrán que explicar ante la autoridad la razón por la cual se “perdieron” unas 17 mil boletas y no las reportaron en tiempo y forma. En cada paquete electoral faltaban entre 100 a 50 boletas, en otras muchas más. Entre las pruebas que aportó se encuentra la lista certificada por el INE de las boletas que recibió cada uno de los presidentes de casilla y las que fueron entregadas, así que no hay duda sobre la forma de operar del partido en el poder.
Arnulfo Montes Cuen quien fuese candidato por el Partido Humanista a la diputación federal por el segundo distrito electoral presentará ante el Tribunal Estatal Electoral la impugnación al resultado de la elección, puesto que le fueron anulados unos 8 mil votos. De manera burda, le invalidaron los votos al poner una cruz en otro recuadro, solamente que en lugar de hacerlo con el marcador que fue usado por los ciudadanos y ciudadanas, lo hicieron con pluma ¿cómo la ven?
Múltiples irregularidades está documentando Montes Cuen, por lo que existe confianza en que haya un cambio de resultado, dado que pide el recuento de voto por voto.
Para el candidato del Partido Humanista a la diputación federal por el segundo distrito electoral fue evidente el fraude electoral, que fue gestado desde Casa Morelos.
Arnulfo brinda apoyo legal a candidatos de todos los colores.
En el argot político dicen que el gato de Graco no se saldrá con la suya.
Hasta aquí llegó la tinta por hoy.
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