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Limpiar la Inmundicia
Los más obstinados suelen ser los más equivocados, como todos los que no han aprendido a dudar.
Samuel Butler (novelista) (1835-1902), novelista inglés.
Arely Gómez, la procuradora de Justicia que se puso de cuclillas al final del túnel por el que escapó Joaquín El Chapo Guzmán, es hermana de Leopoldo Gómez, el poderoso número 2 de Grupo Televisa. Ambos son hijos de Arely González Garrido y nietos de Salomón González Blanco y Josefa Garrido Canabal, y primos distantes de Graco Ramírez.
El dato nos llevaría a dar por descontado que en el caso de la denuncia ciudadana por peculado ante la Procuraduría General de la República, el jefe de Palacio de Gobierno no tendría problema mayor. Ramírez-Garrido interpuso en mayo último una demanda de amparo por la Averiguación Previa AP/PGR/UEIDCSPCAJ/FECCSPF/M-X/066/2015 iniciada en marzo último en la PGR, en el Juzgado 13 en materia de Amparo Penal de la Ciudad de México, la cual no fue admitida por el juez Jesús Chávez Hernández.
A la Consejería Jurídica del poder Ejecutivo, cuya sucesión de fracasos legales es merecedora a nominación de algún premio, le negaron el amparo mediante el cual pretendía conocer los términos de la denuncia al ordenar el despacho de fotostáticas simples al solicitante.
El indiciado, lo consignamos aquí en junio último, es porque tiene contra sí la sospecha de haber cometido un delito. En el caso del inquilino de Chimalacatlán 16, si no peculado, si no malversación de recursos, si no desvío de fondos públicos, al menos indisciplina presupuestal. Si Coneval quitó lo invisible a los nuevos pobres de Morelos de los dos años últimos, un acto de justicia será lograr hacer visibles a los nuevos ricos.
La sociedad morelense lo ha encontrado culpable de la comisión de un delito, pero eso no basta. De poco sirvió que el plebiscito del D7 le haya menguado la fuerza política en Matamoros 10 y San Lázaro, así como en las municipalidades del estado. Cancelada la posibilidad del refrendo del cargo –cuyos corresponsables han sido las Direcciones estatales de los partidos políticos sentados alegremente a la Mesa de la Reforma Política, a cambio de cargos de primero y segundo niveles en los gabinetes-, lo que sigue es la incoación de la figura del Juicio Político, la que para empezar tendría primero que ser admitida en la Cámara de los Comunes.
El principio del fin de la fiesta de Palacio de Gobierno tiene sus coartadas: buscar la Secretaría de Gobernación, para lo cual se promueve criticado el sistema de seguridad y justicia y sugiriendo qué hacer para superar la crisis, como si sus antecedentes en Morelos fueran ejemplares, y la búsqueda de la candidatura del PRD a la Presidencia de la República, sin más mérito que sus simples deseos, para negociar su inmunidad. En ambos casos la consecución es tan difícil como hacer caminar a El Morelotes.
Son tantos los problemas políticos propiciados por una inadecuada gobernanza, que no es lo mismo, para efectos de praxis política, levantar la casa que limpiar la inmundicia. Lo primero supone acciones cosméticas para ganar un pase automático a la impunidad. Lo segundo, no.
letraschiquitas.- El maestro Marcos Manuel Suárez Ruiz decía en clase que no es lo mismo hombre a pie que conduciendo un vehículo: Entre más grande éste, más se convierte aquel. La mañana de hoy, un chofer de una camión de carga hizo una maniobra para impedir el paso a una camioneta con matricula oficial, y con impresionante inmediatez actuó por pedido la Policía de Alberto Capella –aplaudido por empresarios que antes le hacían duras críticas- contra el prepotente y abusivo conductor convertido en troglodita que asustó a los “ofendidos”: hombres de bien todos, escoltas y escoltados, usted sabe: el convoy al servicio de la Gubernatura de Morelos***. Por cierto, a esa reunión de aplausos de empresarios cuyo presidente no resistió –sigue resistiendo con entereza- los cañonazos de la Jefatura de Gabinete, llevó Capella a Jorge Messeguer, para acreditar a quién debe la chamba***. El alcalde de Coatlán del Río, Juan Francisco Sánchez, cedió el mando y el presupuesto de la seguridad de su municipio a la Policía estatal, y no pudo evitar el secuestro de su padre, quien fue encontrado muerto esta mañana***. ¿Qué lectura tiene que dos empleados del rector Alejandro Vera, de la Universidad estatal, Mario Caballero y Gerardo Ávila, se hayan reunido con Guillermo López Ruvalcaba y entratado asuntos que culminarían con la sucesión rectoril?