Ojos Ciudadanos Por Martín Pérez ojosciudadanosmorelos@gmail.com
¿Cuál será el mejor argumento para votar a favor de alguno de los candidatos a la presidencia municipal de Cuernavaca?
Raúl Iragorri Montoya, MORENA.
Ha sido un empresario exitoso, que inició con una agencia distribuidora de autos Nissan y a la fecha acumula cuatro negocios. No es una persona que haya vivido enchufado al presupuesto. Es un hombre de experiencia, que busca el reconocimiento social y que sabemos no llegará a atracar las finanzas públicas. Han sido constantes y consistentes sus señalamientos en contra del gobernador del estado, Graco Ramírez Garrido Abreu, lo que sin duda le ha ganado simpatía de parte de un importante sector de la sociedad, sobre todo porque han sido víctimas de la violación a sus derechos humanos por parte de elementos del Mando Único. Fue diputado local y candidato a la gubernatura. Cuando legislador local, pretendió legalizar el matrimonio igualitario y en su momento recibió fuertes críticas, pero logró el reconocimiento de este sector social.
Cuauhtémoc Blanco Bravo, PSD.
Es una gente exitosa, muy popular. Conquista con facilidad a las mujeres, con su carisma. Ha sido ídolo deportivo durante casi 25 años, por lo que arrastra multitudes. Es una gente que vive de la publicidad y para la publicidad. Será su primera experiencia en la política y no es político, lo cual le ayudará por el desprestigio social que tienen los partidos políticos. Cuenta con 42 años de edad y el 14 de abril jugará su último partido de fútbol como profesional, cuando alineé con el equipo Puebla en contra del Toluca.
Jorge Messeguer Guillén, PRD—PT.
Es ingeniero civil de profesión, cuenta con un buen currículum como servidor público. Fue diputado local, dirigente estatal del PRD y secretario de gobierno del estado durante dos años, durante la administración de Graco Ramírez Garrido Abreu. Es de línea dura y la gente piensa que se requiere de línea dura para resolver los problemas de la ciudad. Se encuentra en la madurez de su vida, al tener 54 años de edad. Tuvo el apoyo unánime del pleno del Consejo Estatal del PRD para su postulación.
Maricela Velázquez Sánchez, PRI—PVEM—PANAL.
Es abogada de profesión, egresada de la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales de la UAEM, así que se ganó su título con esfuerzo y dedicación. Es joven y podría ser factor para que hombres y mujeres jóvenes votaran por ella. Es carismática, sencilla y educada. Corta carrera política, como diputada federal, entre los que se encuentran: importantes beneficios para los empresarios por medio del Instituto Nacional del Emprendedor; con la Secretaría de Hacienda gestionó 104 millones de pesos para disminuir el déficit histórico de la UAEM; obras por 80 millones en infraestructura básica en la colonia Bosques de Cuernavaca; 13 techumbres en escuelas públicas; intercedió ante el Sistema de Administración Tributaria para que regresaran el IVA a empresarios morelenses; y, gestionó recursos para la construcción del nuevo auditorio cultural municipal de Cuernavaca, que se iniciará en breve. Maricela sabe de gestión de recursos ante la Federación y esto puede ayudar en mucho a recomponer la ciudad, en momentos en que se enfrenta una deuda de casi 660 millones de pesos y de que con este lastre se reducen los recursos para realizar obra pública. Además logró una excelente relación con el Presidente de la República, Enrique Peña Nieto, al estar como secretaria de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados del Congreso de la Unión, durante un año. Corta carrera política, pero muy productiva. Es la soltera más codiciada del momento, por su buena presencia física, y algún atrevido le ha preguntado: De ganar, ¿quién será el presidente del DIF en Cuernavaca?
Luis Miguel Ramírez Romero, PAN.
Ha sido regidor de Cuernavaca, diputado local y diputado federal. Siempre ha sido fiel al partido blanquiazul, así que es de lealtad probada. Luce una muy buena sonrisa, luego del tratamiento de ortodoncista y blanqueamiento que le hicieran expertos, lo que le dio una buena imagen, anteriormente se significa por su fea dentadura; a esto habrá que sumarle, que le dieron tratamiento del cutis facial. Es padre de familia de ocho retoños, lo que sin duda lo obliga a trabajar duro para mantenerlos.
Este columnista no votará por ninguno de los arriba descritos, ¿cómo la ven?, porque tiene su residencia en Temixco.
La sociedad cuernavacense es multifacética y hay simpatizantes para todos los candidatos.
Es más difícil escribir sobre los puntos positivos de cada uno de los candidatos que aspiran a dirigir esta urbe, que los puntos negativos, porque es más fácil destruir que construir, diría un ingeniero civil.
Los ciudadanos esperamos una campaña de propuestas, qué nos digan los candidatos cómo van a resolver los grandes problemas que nos aquejan.
Este columnista les pide a todos los candidatos que retomen el tema de la Central Camionera –que fue una propuesta de 30 organizaciones de la sociedad civil, colegios de profesionistas y cámaras empresariales– para que sea un punto que detone la actividad económica, porque qué vergüenza que venga gente del norte y centro del país y vean las terminales de autobuses que tenemos, cuando allá en su tierra casi parecen aeropuertos, con buenos servicios, no hay que estar peleándose con el agente de tránsito en la avenida Morelos para que permita bajar las maletas del taxi frente a las instalaciones de las Juntas Especiales de Conciliación y Arbitraje.
En la mayoría de las ciudades del país, en especial las capitales de los estados, las Centrales de Autobuses se encuentran en las afueras, tienen rápida conexión con la autopista más cercana y los vehículos pesados no entran al centro de la ciudad, a diferencia de lo que pasa en Cuernavaca.
Supuestamente, Cuernavaca es una ciudad turística (pues así están los precios de hoteles, restaurantes y prestadores de servicios), pero no contamos con señalamientos suficientes para llegar al centro de la ciudad desde cualquier punto o entrada de la carretera, además de que el automovilista particular tiene que jugarse la vida con las rutas del transporte colectivo y los camiones foráneos. Uno como habitante de la ciudad, está acostumbrado a aquello de “ahí te va la lámina”, pero los turistas no. En las entradas de la ciudad, no se alerta a los visitantes sobre el riesgo que implica manejar en Cuernavaca, en donde los colectiveros, taxis y motos de entrega rápida conducen sin precaución y a la ofensiva.
En el aspecto turístico, pocos atractivos tenemos que ofrecer al visitante. Mucho se mejorará la ciudad con el cierre al tráfico vehicular de la calle Guerrero del Centro, y con la construcción del nuevo auditorio cultural municipal en Teopanzolco, así como con la llegada de dos nuevas inversiones privadas en dos mega plazas comerciales, la primera, en lo que eran los terrenos del Club de Lago –a un costado de Plaza Galerías—y la segunda, en los terrenos que eran de la empresa Confitalia—Rivetex, en donde será construido también un complejo hotelero. Pero no obstante estas inversiones que serán una realidad a partir del próximo año, falta mucho más para poner a Cuernavaca en los primeros lugares en materia turística de destinos sin playa.
Urge la reactivación económica, para disminuir el desempleo y por ende los índices de violencia y delincuencia que nos aquejan. La industria sin chimeneas es uno de los caminos para lograrlo.
Los hoteles de la ciudad –desde el de cinco estrellas hasta el de una estrella—padecen por la falta de ocupación de lunes a jueves, por ende tienen que elevar sus precios los fines de semana para compensar las pérdidas. No habrá quién detone el turismo para la gente de la tercera edad, las convenciones y centros de negocios.
Este columnista espera las propuestas de los candidatos, el espacio se encuentra abierto. Saludos a todos.
Hasta aquí dio la tinta por hoy.
—o—