POR AURORA ALBAVERA SOTELO, corresponsal de “Mundo Magazzine”
HAY QUEJAS ANTE LA PROFECO
La Procuraduría Federal del Consumidor algo debe hacer ante las quejas de los consumidores, mismos que aseguran haber ido a comprar artículos para Reyes Magos y éstos salieron defectuosos.
Ante esto, los consumidores fueron a la tienda Comercial Mexicana de la Selva y al entrevistarse, primero con la responsable del departamento de electrónica, ésta en forma majadera y déspota, aseguró que yo no puedo hacer nada. Va en contra de las reglas.
Cabe destacar que los consumidores adquirieron una Tablet, ya que uno de los pequeño le pidió eso a los Reyes Magos y éstos al acudir a la Comercial Mexicana de la Selva, vio la promoción de meses sin intereses de la mencionada Tablet en la cantidad de pesos y se compró.
Antes de salir de la >>Comer<< se pasó al departamento de atención a clientes para poner el sello de garantía y con esa >>garantía>> el cliente se fue satisfecho. Cabe destacar que el artículo se compró poco antes del día 6 de enero, como por el día de diciembre de este año.
Se llegó el Día de Reyes y la personita al recibir sus regalos, se puso feliz porque le trajeron lo que pidió. Pero por desgracia, la niña tuvo que hacer un pequeño viaje y al regresar, hace unos días , quiso utilizar la Tablet y ésta no sirvió, se trabó y simplemente no se pudo utilizar.-
Los consumidores conscientes de que ya habían pasado varios días y al parecer la garantía ampara siete o nueve días, fueron a ver, primero a la encargada del departamento de electrónica, misma que se portó grasera y altanera.
De allí se pasó con el gerente dizque de la tienda, y por igual. El consumidor apeló a la buena voluntad del generte, >>pues ellos no pierden nada si la cambian<<, pero éste se negó y dijo háganle como quieran y si quieren ir a la PROFECO vayan, aquí aplicó yo las reglas. Se le insistió que la Tablet salió defectuosa y que era una porquería, pues el enfado subió de tono, pero no se logró nada.
El gerente de la >>comer<< La Selva simplemente se rio del consumidor. Y eso no se vale. Por lo que algo tiene que hacer la PROFECO, pues los consumidores van a comprar artículos que sirvan y no chafas, aunque el precio haya sido mínimo la gente no tiene por qué regalar su dinero.
