TERTULIA POLÍTICA, Por Pedro Martínez Serrano
PRI / MORENA
De cara al 2018, cuando se elegirá al próximo gobernador, el número 39 a partir de la erección del Estado en 1881, con Carlos Pacheco Villalobos, como el primer mandatario de la entidad, los partidos políticos se alistan para la renovación de sus comités estatales, en particular el Revolucionario Institucional (PRI) y el Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) que, dicho sea de paso, sus dirigencias navegan a la deriva, sin rumbo, extraviadas.
En el caso del Revolucionario Institucional el actual presidente, el doctor Rodolfo Becerril Straffon, hace como que hace, pero no hace nada, como no lo hizo durante la jornada comicial, cuando el tricolor volvió a ser derrotado. Becerril, supongo que lo que menos quiere, es que se acuerden que está en la presidencia. No quiere dejar de cobrar y manejar el presupuesto asignado a ese instituto político.
Peor aún, el doctor Becerril Straffon creo que se va con más negativos que positivos, por una sencilla razón, se olvidó de quienes estuvieron siempre con él, en las buenas y en las malas, sobre todo malas. Todos sus apoyos, los centró en el empresario Carlos Hernández Adán, a quien hizo candidato a regidor en Cuernavaca y, ahora, pidió para él y consiguió, la secretaría de asuntos legislativos del Congreso del Estado.
Se olvidó y seguramente cuando los necesite, ya no estarán para apoyarlo, de jóvenes talentosos, como Miguel Ángel Alarcón Urbán, joven político de Yautepec; Angélica de la Torre Núñez, ahora Maestra en Ciencias Políticas y Sociales, pero priísta de siempre, así como de Juanita Guerra Mena, quien consiguió la candidatura a la diputación local por Cuautla sur, pero que al final dejó sola.
Pero bueno, más allá de la historia de traiciones y simulación que distinguió al doctor Becerril Straffon al frente del PRI Morelos, lo que se da como un hecho, es que a más tardar el 15 de octubre seleccionará a su nuevo presidente estatal, de entre Francisco Alejandro Moreno Merino, Matías Nazario Morales y Víctor Manuel Saucedo Perdomo (en estricto orden alfabético de nombre y/o primer apellido).
A la vista, me parece que son los tres que tienen las relaciones de que se debe disponer en los centros del poder priísta, en la Ciudad México, en el comité nacional del tricolor, tanto como capacidad de convocatoria y liderazgo en la entidad, son Matías, Moreno y Saucedo.
MORENA / OCTUBRE
Al igual que en el PRI, sólo que en Morena está confirmado, de acuerdo a su convocatoria correspondiente, el próximo 20 de octubre se seleccionará al presidente del Consejo Estatal, todavía ocupado por el desconocido Eduardo Beltrán Zapata.
Según se sabe, en el Movimiento de Regeneración Nacional, será en todos los estados, incluido el Distrito Federal, en donde se renovarán sus conejos estatales, mediante la sencilla, aunque no por ello menos complicada, selección de delegados, 10 por distrito electoral federal.
Por lo anterior, es de adelantarse que aquí, serán 50 los delegados que se encargarán de designar a su próximo presidente del Conejo Estatal, aunque no hay que olvidar que el gran elector en la localidad, es el senador Rabindranath Salazar Solorio quien, de tirar línea, tiene varios activos de entre los cuales apuntalar al próximo dirigente y, de entre ellos, sin duda, tendrá que valorar talento, relaciones y, naturalmente, liderazgo, cualidades que se requieren para darle nivel a cualquier instituto político.
Entre quienes mencionan los simpatizantes de ese partido, se encuentran, Pedro Delgado, el esposo de la ex presidenta municipal de Jiutepec, Silvia Salazar, enfrentada al senador Salazar Solorio. El primo de Rabín, el ex diputado local Arturo Flores Slorio, además de su hermano, Radamés, en cuyo caso, creo que los miembros de Morena, no verían bien ni a uno, ni a otro.
Además de lo anterior, en su condición de seguro candidato al gobierno del Estado, Rabindranath debe buscar un presidente de nivel, un hombre relacionado con los actores políticos de la localidad, pero también con capacidad organizacional y de convocatoria, frente a lo cual, creo que dispone de dos activos sumamente importantes: Víctor Sánchez Trujillo, ex diputado federal y el empresario inmobiliario, José Evaristo Silva Bandala, ambos ex presidentes de la Federación de Estudiantes Universitarios (FEUM). Ni Víctor, ni Pepe Silva, se han visto vinculados a escándalos, como tampoco se les conocen historias negras, de esas que desprestigian a cualquiera.
