TERTULIA POLÍTICA, Por Pedro Martínez Serrano
Lo peor empezó hoy
El nuestro es un estado sin rumbo, a la deriva, en el que las autoridades de los tres órdenes y quienes las integran, buscan flotar de manera tramposa y administrar la desgracia; en todos los casos, la administración pública se corrompe y responde a intereses de partidos y personas sin escrúpulos; todos condicionan para encarecer las extorsiones, los sobornos y las comisiones.
Morelos acusa un abandono escandaloso, en medio de un gobierno extraviado, corrupto y abusivo, en el que la disputa de sus integrantes, por el control de las cuotas de poder y dinero, afecta a los morelenses, pero en todos los casos beneficia a la casta dorada del virrey de Tabasco, el enloquecido y trastornado señor Graco Ramírez, tanto como a su hijastro, el corruptísimo, vengativo y arrebatado Rodrigo Gayosso Cepeda, el mozalbete que en estado de ebriedad y, seguramente drogado, escandalizaba a las puertas de “amistades” que lo evadían para escapar a sus caprichos.
Y mientras Morelos se desmorona, se cae a pedazos y se exhibe en el mundo, como una entidad insegura, corrupta y peligrosa para los visitantes extranjeros, el todavía gobernador de los caprichos y las corruptelas, emprende una más de sus locuras, se embarca en la aventura de buscar la candidatura presidencial, cuyo costo de sobornos a los ladrones que controlan el PRD nacional, como Jesús Ortega Martínez, Jesús Zambrano Grijalva y Carlos Navarrete Ruiz, lógicamente será una factura a pagar por los morelenses, por el dinero que se les ha robado con la asignación tramposa de obras y la contratación de servicios que no se realizan pero que se pagan con el respectivo quinto real que se encarga de recibir el presidente del PRD en Morelos, Rodrigo Gayosso Cepeda.
A la larguísima cadena de caprichos y raterías de los Ramírez-Gayosso-Cepeda-Purón, se suma el más grave atentado en contra de los residentes de Cuernavaca, de sus comerciantes de siempre, la locura peatonal, la llamada ecozona en que el trastornado señor Ramírez va a convertir el primer cuadro de la ciudad capital.
Va a cerrar el tránsito vehicular, para convertir el resto de las calles que integran el perímetro del Centro Histórico, en algo similar a la porquería, al mugriento tianguis, al basurero de mercancía de dudosa procedencia a que condenó la histórica calle de Guerrero, el corazón comercial de Cuernavaca.
Con todo y la persuasión corruptora del nuevo subsecretario de gobierno, Jorgito Meade González, el cobarde golpeador de estudiantes, sumiso y servil gato de Rodrigo Gayosso Cepeda quien se ha encargado de hacerle rico, no habrá dinero oficial para comprar las conciencias y la dignidad de los cientos de familias que radican en el primer cuadro y poseen lazos comerciales desde hace décadas, porque antes de la complacencia de caprichos pendejos (Diccionario de la Real Academia Española: coloquial. Hombre cobarde y pusilánime / Hombre tonto, estúpido), está la defensa de lo correcto, de la identidad, de la pertenencia y del desarrollo ordenado y alejado del espejismo corrupto.
LO PEOR EMPEZÓ HOY
A ese gobierno amorfo, corrupto, abusivo y plagado de intereses de fuereños, muchos de ellos ligados a grupos criminales, se suma a partir de hoy una pandilla de vividores, oportunistas y extorsionadores que, al amparo de la investidura de diputados locales, se afilan las uñas para rascar con mayor rigor y, con el trillado recurso de que hay que ayudar a que le vaya bien a Morelos, se alistan para servir hincados, arrodillados al cpricho gubernamental; se preparan para aprobar lo que mande el señor gobernador. Saben y saben bien, que en ese vulgar mercado en que está convertido el Congreso del Estado, todo se compra, todo se vende.
La legislatura que arrancó hoy, con un gigantesco sello de pendejismo entre sus integrantes (vamos a exhibir los alcances, mañas y talentos de cada uno de ellos), se mostró reducida, muy corta frente a la embestida de la turba que intentó ingresar al desprestigiado recinto legislativo, para exigir que se inicie el juicio político en contra del corrupto, tramposo y vengativo Graco Ramírez.
No costaba absolutamente nada, dar paso a quienes lo único que querían era expresar su descontento con el gobierno de Graco. Entre quienes encabezan el movimiento, hay gente pensante, profundamente resentida con el tabasqueño, más por traiciones y rencores personales, que por una sincera y verdadera defensa de los morelenses (Raúl Iragorri Montoya el ejemplo) y, por tanto, se les podría haber llamado al orden en el ingreso, pero los diputados no lo quisieron, evitaron molestar al tabasqueño, con las gráficas en redes sociales (que NO en medios de comunicación, hoy arrodillados, inclinados a Graco), en las que se cuestionara al gobierno.
Los diputados y diputadas (como decía el mamón de Vicente Fox y hoy repiten propios y extraños), no estuvieron a la altura de la circunstancia; les quedó grande el evento de instalación de la LIII Legislatura, como les quedó grande también la responsabilidad de dar la cara a quienes los eligieron y a quienes no, también.
Por lo anterior, por los tramposos arreglos que todos sabemos que existen, sabemos también que si la anterior fue la peor legislatura que ha pasado por el Congreso del Estado, la actual, está llamada a superar ese servilismo y saqueo muy propio de quienes despachan, como en este caso los diputados.
Así las cosas, lo peor está por venir, más aún cuando en varios municipios, especialmente en Cuernavaca, va a gobernar a patadas, que es lo único que sabe tirar el pintoresco vulgarcillo de Tepito, el señor Cuauhtémoc Blanco Bravo, el mismo que acostumbra dirimir sus asuntos a chingadazos. Lo peor empezó hoy.
