TERTULIA POLÍTICA, Por Pedro Martínez Serrano
Tajadas
Hace unos tres años me tocó escuchar al diputado local (y federal electo) Javier Bolaños Aguilar, jurar lealtad casi perruna, al presidente municipal de Cuernavaca, el doctor Jorge Morales Barud; es un profesional de la política, honesto y comprometido con el servicio público, me dijo entonces el traidor y corruptísimo señor de los portafolios.
Bolaños, que se enriqueció hasta la locura gracias a fraudulentas obras hidráulicas millonarias, ahora piloteado por su cómplice Javier López Sánchez, está convertido el sumiso lacayo de Graco Ramírez, a quien le hace el trabajo sucio desde el Congreso del Estado y, desde ahí, también golpea a quienes estorban y/o molestan a su patrón.
El enlace de esa relación perversa y nociva para los morelenses, es el jefe de prensa de Graco, el licenciado en periodismo al puritito vapor, su compadre, el extorsionador Jorge López Flores, quien se encarga de tirarle línea al corrupto veracruzano, ese que hoy cuestiona con rudeza al alcalde de Cuernavaca, Jorge Morales Barud.
Con una actitud rabiosa, el diputado panista más perredista, arremete por todo en contra del alcalde Morales Barud; recuerdo que hace unos meses, el abogado Guillermo Pasquel, el que defiende la causa perdida de la Promotora Ambiental (PASA), habló de incoar juicio político en contra del presidente municipal.
Antes se había reunido con el diputado panista hasta en tres ocasiones, lo mismo en su domicilio, allá en Ahuatepec, que en una cafetería localizada en el libramiento de la Autopista México Acapulco, en sentido sur a norte, a la altura de la colonia Antonio Barona. Me dicen que en un par de ocasiones, hizo entrega de sobres muy abultados.
Ahora a través de su portal de noticias, dirigido bajo el agua por el jefe de prensa del Congreso local, su socio y piloto, el bandidazo Javier López Sánchez, el acosador sexual y presunto pederasta, Javier Bolaños arremetió en contra de todos los integrantes del cabildo, por haber desincorporado una calle, la que cruza por dentro de los terrenos propiedad del COSTCO y Comercial Mexicana, entre las Avenidas Gobernadores y Domingo Diez.
En ese tema, una sola razón motiva el enojo de Bolaños Aguilar: intentó sacar su tajada, su comisión, como en todos los asuntos que pasan por el Congreso y requieren aprobación. Para aprobar los créditos a los ayuntamientos, se deja pedir cantidades exorbitantes, a excepción del caso de Cuernavaca, en donde la línea de Graco Ramírez, por medio de su gato Jorge López Flores, es negar cualquier negociación financiera a favor del municipio.
En el tema de la desincorporación del predio, el diputado y empleado de PASA, que se contrató también como cabildero de la empresa regia NL Technologies, que busca la concesión del alumbrado público en los 33 municipios de la entidad, olvidó que todos los regidores panistas votaron a favor.
Lo que no se dice en su portal de noticias y mucho menos en Diario de Morelos y/o La Extra, que sigue manejando el jefe de prensa del gobierno, Jorge López Flores, es que precisamente Javier Bolaños es el interesado en que los cabildos aprueben la concesión del alumbrado público hasta por 20 años, a la empresa regiomontana.
Quien anda ofreciendo dinero a los regidores a cambio de la firma a favor del proyecto de la conc esión del servicio de alumbrado público, es nada menos que el jefe de prensa del congreso, Javier López Sánchez, el socio del panista más perredista, Javier Bolaños.
